A pesar de la importancia de su filmografía, y de que se trata de un cineasta relativamente conocido (sobre todo desde que le dieron el Oscar), hasta la fecha no había ningún libro dedicado a estudiar en profundidad la figura de Hayao Miyazaki, de sus influencias y las bases de sus historias. De hecho, apenas hay volúmenes dedicados al Studio Ghibli en general, siendo el mayor exponente Manuel Robles con su Antología del Studio Ghibli (cuya segunda entrega está por llegar), e incluso existe un cuasi desconocido libro sobre El viaje de Chihiro, del que un día de estos publicaré una reseña. Así que la publicación de El mundo invisible de Hayao Miyazaki ha sido toda una bocanada de aire fresco para los que amamos el cine de Ghibli y del director de Porco Rosso en particular.
En El mundo invisible de Hayao Miyazaki su autora, Laura Montero Plata, se sumerge en las raíces del cineasta japonés, se centra en los detalles de sus obras, para ofrecernos una visión total de su universo. Así, nos relata no solo los inicios de la carrera del realizador de Nicky, la aprendiz de bruja, sino también, para contextualizar, nos ofrece un resumen sobre la historia de la animación japonesa, y también habla sobre los estudios y creadores más importantes del país. Creando de dicha forma una visión del conjunto de la industria del anime, para después centrarse en el caso concreto del Studio Ghibli y su director principal. Así pues, el volumen se divide en cinco capítulos más la introducción y el epílogo.
En la introducción comenta brevemente los estudios que se han realizado sobre el cineasta en otros países, así como da unas cuantas notas biográficas del mismo, y explica el punto de vista que ha tomado para realizar el estudio y algunos apuntes a la visión de otros investigadores, finalizando con un pequeño avance de lo que leeremos en los posteriores apartados.
El primer capítulo, como ya he adelantado, versa sobre la historia del anime y la autora también intenta resolver la cuestión de por qué el cine de Miyazaki, muy especialmente a partir de La princesa Mononoke, tiene un éxito tan fulgurante en su país natal que ningún otro realizador, que en Occidente solemos considerar a su altura (Otomo, Oshii, Kon...), llega a recaudar ni una décima parte de lo que lo hacen sus obras.
El segundo capítulo versa sobre las influencias que han hecho la obra de Miyazaki lo que es. Desde las lecturas de manga que más impacto ejercieron cuando era infante, con autores como Osamu Tezuka, muy conocido por estos lares, o Sanpei Shirato y Tetsuji Fukushima, desconocidos completamente para quien escribe; pasando, ya en su juventud, por las novelas que más mella le hicieron, centrándose en la exposición que organizó el Kochi Literary Museum con los cincuenta libros de literatura infantil y juvenil que el cineasta seleccionó según sus gustos, donde se recogen muchos títulos clásicos occidentales, pero en el que destaca más que ninguno El principito y otras obras de Antoine de Saint-Exupéry (que era amante de la aviación como Miyazaki) cuyo mensaje caló muy hondo en el director; le siguen, en cuanto a escritores de occidente, Lewis Carrol y Ursula K. Le Guin, con sus obras Alicia en el país de las maravillas y Un mago en Terramar respectivamente, pasando por autores japoneses como Kenji Miyazawa, Sachiko Kashiwaba y Reiko Nakagawa. También en este capítulo habla de las influencias gráficas, mencionando a Hokusai y La gran ola de Kanagawa, y terminando con films de animación como La reina de las nieves, de Lev Atamanov, o The Curious Adventures of Mr. Wonderbird de Grimault, así como los cortos de los hermanos Fleischer y otras tantas referencias. Laura Montero no se limita a dar una lista, sino que muestra ejemplos claros de dicha influencia, así como declaraciones del propio Miyazaki reconociéndolas. Este y el primer capítulo son, a mi juicio, los más amenos e inmersivos de toda la monografía, ya sea por los datos que aporta, acerca de cómo se trabaja en Ghibli y cómo es el resto de los estudios japoneses, o declaraciones tan interesantes como las que realizó Mamoru Oshii, opinando sobre el estudio y Miyazaki, y también el recorrido que se hace sobre otros autores y sus obras; así como muchos detalles, anécdotas, que desconocía por completo y que deja entrever la personalidad del creador de Mi vecino Totoro.
El tercer apartado se centra en los rasgos puramente japoneses de la obra de Miyazaki, haciendo hincapié en dos filmes que, a priori, no se parecen mucho, como son La princesa Mononoke y El viaje de Chihiro, pero que la autora nos demuestra que no es así. Para ello ahonda en el folclore y la mitología nipona, que es precisamente de donde emergen sendas historias (ciertamente el concepto del Tokoyo me ha dado una nueva visión del mundo, del universo, del realizador). Este capítulo es fundamental para entender, como conjunto, la filmografía de Hayao Miyazaki, y es sumamente interesante, pero también resulta muy denso en varios subapartados (como en el que analiza la estructura de El viaje de Chihiro).
En la penúltima parte desgrana la personalidad de los personajes miyazakianos, así como realiza un esquema en el que se podría englobar todas sus películas, y, para ello, utiliza (y explica de forma breve) las funciones de Propp, Campbell o Vogler. Con ello analiza y clasifica los tipos de personajes, su evolución, y su “funcionalidad”.
El quinto y último capítulo se adentra en la obra, propiamente dicha, de Miyazaki, desde sus mangas, pasando por las series y films en las que tuvo un papel activo, hasta terminar con sus películas, cortometrajes o libros de arte. El punto de mayor interés que puede tener este apartado para gran parte de los lectores, es el hecho de que se comenta sobre muchas de las obras que no han llegado a Occidente, o incluso simplemente ni si quiera sabíamos de su existencia. Además, también vemos cómo Miyazaki recicla ideas continuamente, ya sean diseños o historias, de forma consciente o inconsciente. Finalmente, la autora expone su teoría [SI TE VAS A COMPRAR EL LIBRO, LO MISMO NO QUIERES LEERTE EL FINAL DEL PÁRRAFO] de que en realidad toda la obra de Miyazaki, ya sea animada o en papel, pertenece a un mismo universo solo que cada una de las partes ocurre en diferentes épocas del mismo[FIN].
Termina el volumen con un epílogo donde Laura Montero realiza un resume de lo escrito y las conclusiones a las que le ha llevado su meticuloso estudio. Estudio que está escrito, en su mayor parte, con un lenguaje cuidado pero accesible, de forma muy amena (personalmente los dos primeros capítulos fueron los que más me divirtieron, como ya he apuntado) y sin apenas erratas.
Hablando de errores, haberlos los hay, pero son muy pocos. Aún así, y más que nada con ánimo de poder aportar un granito de arena para mejorar el volumen en futuras reediciones, apuntaré aquellas que más han llamado mi atención. Por ejemplo, en alguna ocasión hay confusión de títulos, particularmente El castillo ambulante en vez de El castillo en el cielo (p. 79); también debe de ser un error el presupuesto que dice la autora que tuvo La princesa Mononoke, que indica fue de ciento dos millones de euros (p. 67), teniendo en cuenta que el film recaudó esa misma cifra, eso habría supuesto la quiebra del estudio; otros detalles que me han llamado la atención es la confusión de algunos nombres, como Toshihiro Suzuki en vez de Toshio Suzuki en una de las notas a píe de página, y sobre todo el de la escritora e ilustradora infantil Reiko Nakagawa por Reiko Nakawaga (pp. 100-102). Fuera parte de ello, salvo una traslación de algunos personajes en la tabla de la página ciento setenta y cuatro, y una o dos frases mal construidas, así como algún carácter movido en unas pocas palabras, el volumen está impecablemente trabajado.
Hablando del trabajo de su autora, es necesario mencionar la igualmente buena labor de Dolmen Editorial con la edición. Tapa dura, a color cada una de sus más de doscientas cincuenta páginas, papel de muy buena calidad, maquetación impecable y profusamente ilustrado. A todo ello hay que sumar que la portada es simplemente maravillosa, invita a escrutarla y reconocer cada uno de los personajes que la pueblan. El único hándicap es que sus veinticuatro euros no hace que sea una adquisición barata, pero según mi punto de vista, por la calidad del conjunto, es un precio justo.
Al final de la lectura de El mundo invisible de Hayao Miyazaki, se cobra constancia que todas las películas del cineasta tokiota forman parte de un todo coherente, con detalles que, a ojos de buen cubero todos nos hemos percatado (como los temas recurrentes que toca el realizador, los personajes, etc.), pero que más allá de ello hay otras muchos peculiaridades que a buen seguro se nos han escapado y que leyendo el estudio de Laura Montero, cualquiera que haya visionado los filmes de Miyazaki (incluso aquellos no dirigidos por él pero sí escritos), no tenemos otra que asentir mientras sonreímos. Una obra imprescindible para los seguidores del Studio Ghibli y para los amantes del cine de animación en general.
LO MEJOR:
-Información, mucha información, rigurosa y profunda.
-Que hayan publicado una monografía dedicada al maestro Hayao Miyazaki, y que encima haya tenido éxito.
-Que me lo regalaran por Reyes ^^
LO PEOR:
-Ciertas partes de la introducción y el capítulo tercero se atragantan un poco, aunque es cierto que la información que se brinda en dichas páginas es tan de interés como el resto.
6 comentarios:
Una reseña muy interesante, gracias.
Lo vi ayer en la feria del libro y queria informarme un poco, definitivamente me acercare a comprarlo esta mañana.
Siempre he querido saber un poco mas sobre Miyazaki, ha sido una grata sorpresa encontrar este libro.
PD: siento no poner acentos pero el virus del doble acento me lo impide.
Un saludo ^^
Muchas gracias, me alegra de que te haya resultado útil para decidirte si adquirirlo o no. Espero que su lectura te resulte tan interesante como a mí.
Un saludo, y gracias por comentar ^^
PD: Ego te absolvo...
donde lo puedo conseguir? en que stand de la feria del libro? en argentina
Desconozco si está disponible en Argentina, pero si deseas más información te puedes pasar por la web de Dolmen Editorial: http://www.dolmeneditorial.com/
Saludos
Me encantan las películas de Hayao Miyazaki, tiene una visión fantástica que expresa a través de estos filmes, sin duda una pena su retiro, en hbo go online he tenido la oportunidad de ver varias de sus películas como Arriety, una de las más recientes y que más me ha gustado.
No veo en el dibujo de las tapas ninguna referencia a "Conan, El Niño del Futuro" y eso me parece un error bastante lamentable.
Solo espero que el contenido del libro sea un poco mas considerado...
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