01 agosto 2011

Susurros del corazón

Yoshifumi Kondo estaba llamado a ser el sucesor de Hayao Miyazaki, pero por las vueltas que da la vida el discípulo no sobrevivió al maestro, dejando de esta forma un gran vacío en el Studio Ghibli (muy emotivas fueron las palabras de Miyazaki tras la muerte de Kondo) y una prometedora carrera como director que por desgracia apenas llegó a comenzar. Susurros del corazón (Mimi wo sumaseba, 1995) es, por tanto, el mayor legado que nos dejó, y en el que se adivina un gran talento en esta tierna y emotiva historia sobre el futuro y los sueños.

Shizuku es una chica de 14 años que vive en las afueras de Tokio, es toda una apasionada de la lectura, por lo que va casi a diario a la biblioteca. En cierto momento se da cuenta de que un nombre, Seiji Amasawa, se repite en las fichas de los libros que coge prestados, y siempre los ha leído antes que ella; esto le lleva a preguntarse quién y cómo será el mencionado chico. Un día, de camino a la biblioteca donde trabaja su padre, se encuentra con un misterioso gato al que sigue y que le lleva hasta una vieja y maravillosa tienda, ahí conocerá a un chico que le contará sus sueños y es entonces cuando ella se planteará cuáles son los suyos...

Basado en el manga de Aoi Hiragi, Susurros del corazón es una película con todos los ingredientes como para considerarla una de las más significativas de Ghibli, todo un clásico que ya era hora de que se editara por tierras españolas (bueno, salió a finales de 2009). Estamos ante un shojo, o sea, una obra que en principio va dirigida a las féminas, tiene de hecho todos los ingrediente de ese tipo de historias: chicas que estudian en un instituto y que comienzan a padecer los “males” del amor. Pero es mejor dejar las etiquetas a un lado y simplemente verla como lo que es, una bellísima historia de amor y de reconciliación con uno mismo, con sus aspiraciones y sueños.

No nos encontramos ante un film redondo durante todo su metraje, ya que no es hasta la escena en la que Seiji toca el violín y le acompaña Shizuku cantando cuando nos atrapa por completo. Con eso no quiero decir que los muchos minutos que preceden a dicho instante sean insustanciales o aburridos, pero que sí dicho momento es un punto de inflexión que hace que te metas más en la historia y es cuando realmente no sólo te gustan los personajes, sino que los adoras y los entiendes por completo. Quizá es que logra que, aquellos que ya hemos pasado esa edad, nos retrotraigamos a nuestros años estudiantiles, logrando que volvamos a ellos de forma vívida, casi palpable, inundándonos de nostalgia y cierta melancolía.

Hayao Miyazaki se encargó de supervisar todo el proyecto, además también escribió el guión y realizó los storyboards; y a todo eso hay que añadirle que incluso dirigió los fragmentos correspondientes a Barón (o al menos eso he leído años ha en un par de publicaciones); por lo que la implicación del director de El castillo ambulante fue total.

Susurros del corazón es un magnífico debut, una obra que logra llegar muy dentro del espectador, que consigue que volvamos a escuchar esos murmullos que antaño nos molestábamos en oír y que ahora, una vez que hemos crecido, parece que nos empeñamos en ignorar. 


LO MEJOR:
-La animación. Muy destacable en los planos generales de la ciudad, con cientos de objetos en movimiento: coches, trenes, peatones, luces...
-La magia que destila, la emotividad que transmite, la autenticidad de los personajes...
-La música, compuesta por Yuji Nomi.
-Por supuesto, la dirección de Yoshifumi Kondo.

LO PEOR:
-La facilidad con que los padres de Shizuku ceden ante sus propósitos.
-Que Kondo muriera. Con él se perdió un gran artista.

¿Quién debería verla?
Los fans de Ghibli, y el resto del mundo.

¿Y quién no?
Si nunca quisiste escuchar los susurros...

El momento:
Cuando Shizuku canta junto a Seiji y se unen a éstos un inesperado trío musical. Sencillamente es un momento que destila la magia del cine del estudio creador de Totoro.

La edición en DVD:
La edición que realizó Aurum de esta película es sencilla pero, como nos tienen acostumbrados, correcta. El master es bueno, por lo que la calidad de la imagen está asegurada, el doblaje al español me gusta, aunque pierde un poco si lo comparamos con el japonés. Los contenidos extras son escasos, destacando el storyboard completo de la película, los tráileres, también está "Creando la animación de Barón", que es más que nada una curiosidad. En estos momentos lo podéis adquirir por un precio muy competente, recomiendo mucho su compra. 

6 comentarios:

Sawako-chan dijo...

Anoto esta peli. Mi objetivo es ver todas las pelis de Ghibli antes de que acabé el año :)

Neovallense dijo...

Pues no lo pasarás mal cumpliendo ese objetivo, la filmografía de Ghibli está plagada de grandes películas ^^

Saludetessss

Bambú dijo...

Esta es una de las muchas películas que me faltan por ver de Studio Ghibli. Reconozco que vi las más populares, pero poco a poco iré viendo el resto.

Neovallense dijo...

¡Pues ya estás tardando! xD

De verdad, es una película que merece la pena verla ^^

Joruji dijo...

Una peli preciosa. Nunca olvidaré el mítico "country road" en japo(versión de una canción en inglés creo).
salu2

Neovallense dijo...

Es genial ese momento, y esa canción. Es una versión de una canción inglesa de un creo cantante bastante famoso, pero no recuerdo de quién era ahora mismo...

Salutations