19 enero 2024

Mayorcito de edad (senectud blogueril)

Un día como hoy (exactamente igual no, pero parecido), hace 18 años, escribí que era un gran día para la humanidad. ¿Y por qué lo fue? Porque fue el momento en el que parí (es una metáfora) este insigne blog que te ha dado por visitar (e incluso leer).

También afirmé que sobre estas virtuales páginas vertería mis pensamientos y paranoias varias, y muchas he vertido, pero poco a poco, y como bien habrás podido comprobar (o no), mis motivaciones variaron de eclécticas paridas y desahogos varios, a crónica política y, algo más tarde, me fui adentrando en terrenos cinéfilos y comiqueros y otras lecturas. A través de más de 1.000 entradas has sido, o serás (si así lo deseas), testigo de la evolución de un individuo que, a pesar de todo, y con un ritmo arrítmico, sigue empeñado (con menos fuerzas) en continuar tecleando (últimamente una pantalla táctil durante un trayecto de vuelta en tren o metro) y manchando el procesador de textos.

11 enero 2024

Inu-Oh

Tomona es un jovenzuelo que, como su familia desde hace mucho tiempo, se dedica a bucear para buscar los tesoros Heike, pero un encargo para encontrar uno de ellos lo dejará ciego y le hará seguir la senda de la biwa, la cual le llevará hasta un extraño individuo fascinado por el Noh y al que todo el mundo teme por su horrible aspecto.

Se ve que 2022 fue el año de los animes musicales, primero nos llegó Belle, después One Piece Film Red, siendo el último el estreno más limitado y, también, el menos convencional. Inu-Oh (ídem, 2021), del siempre extravagante Masaaki Yuasa (El amor está en el agua), basado en la novela de Hideo Furukawa, que cuenta la historia de la vida de un legendario artista de Sarugaku Noh del siglo XIV.