La leyenda del samurái (47 ronin)

Estaba un poco perdido Keanu Reeves desde que protagonizara las dos secuelas de Matrix, habiendo participado en alguna producción con buena recepción crítica (como Dueños de la calle), sin embargo desde el cierre de la trilogía de los Wachowski no ha liderado el reparto de ningún blockbuster (mentira, que protagonizó Ultimátum a la Tierra). No obstante, en 2011 se anunció, con cierto boato, la producción de La leyenda del samurái -47 ronin- (47 Ronin, 2013); y a uno, que le tiene cariño al protagonista de Le llaman Bodhi y cierto gusto por los filmes ambientados en el lejano oriente (y en la época de los samuráis en particular), se le quedó el título en la memoria y no pocas ganas de descubrir qué tipo de producto sería.

Kai es encontrado en el bosque por el señor Asano cuando apenas era un crío, quien decide salvar su vida y tenerlo a su servicio. Años después, durante una visita del sogún, Kira, líder de un clan rival e invitado, le tiende una trampa y se ve obligado a practicar la ceremonia del seppuku para limpiar su honor. De ese modo sus samuráis se convierten en ronin, reuniéndose pronto para vengar a su amo.

Ciertamente el visionado del primer tráiler me sorprendió. Me esperaba un drama épico-histórico con una visión claramente americanizada del Japón feudal (pongamos que algo por el estilo a El último samurái de Edward Zwick) y me encontré con una historia épica con alto contenido fantástico (y, obviamente, una visión hollywoodiense del país del sol naciente..., pero también respetuosa). Mi interés por verla en pantalla grande se mantuvo, cosa que hice poco después de que llegara a las salas (sí, he tardado un poco en publicar la reseña).

Cuando salí de la sala me quedé con la sensación de que faltaban trozos de historia, que habían eliminado escenas donde los personajes interaccionaban. Me pasó sobre todo en lo que se refiere al interés amoroso del protagonista, que no termina de cuajar aunque procuran dejarnos claro desde el inicio de que es un amor que viene desde tierna edad. Dicha sensación es el mayor hándicap del debut en la dirección de Carl Rinsch, que hasta la fecha su carrera se ha centrado en la publicidad y algunos cortometrajes.

Técnicamente no es una película que destaque ni que sea original dentro del panorama de los blockbusters (se capta en sus fotogramas aromas de la saga Piratas del Caribe), sin embargo no hay que negarle gusto visual (los fondos que recuerdan a pinturas mate -o quizá estampas japonesas- o el diseño de alguna criatura, por ejemplo) y alguna secuencia con interés (la breve lucha con el samurái gigante, el encuentro en el bosque de los tengu...); sin embargo, como apunto unas líneas arriba, al guion, escrito a cuatro manos por Chris Morgan y Hossein Amini, le falta no algo de chicha, existen películas con menos substancia y mayor poder empático, sino más elaboración de los personajes, sobre todo con algunos secundarios que podrían haber dado mucho juego.

Reeves es la cara más conocida del elenco y (casi) el único occidental. Hiroyuki Sanada es, al menos para quien esto escribe, el segundo intérprete más conocido, al que hemos podido ver en varios filmes de samuráis, como el mencionado El último samurái, El ocaso del samurái, así como en Lobezno Inmortal, y es el verdadero protagonista de la cinta. Min Tanaka (Kenshin, el guerrero samurái: Infierno en Tokio) es el bueno de Asano, mientras que Ko Shibasaki (Llamada perdida) es su inocente hija y la bella enamorada de Reeves. Cary-Hiroyuki Tagawa (Tekken) es el sogún Tsunayoshi, mientras que Tadanobu Asano (Nicky, la aprendiz de bruja) es el malo de la función y Rinko Kikuchi (Pacific Rim) es la bruja consorte y uno de los personajes que más me han gustado.

Así pues, La leyenda del samurái no es, una pena, un estupendo film de aventuras, pero sí que es una película con la que pasar un rato entretenido, sobre todo si se logra pasar por alto sus defectos.

LO MEJOR:

-Ese tono de cuento épico.

-Se nota que, aunque se aleje un poco, está hecha con respeto a la historia original, así como a la cultura y costumbres niponas.

-La bruja malvada.

LO PEOR:

-Cierta sensación de que ha habido remontaje o, al menos, que no han dejado al realizador hacer lo que quería.

-A la historia de amor le falta recorrido.

¿Quién debería verla?

Quien guste de historias de aventuras fantásticas con sus dosis de drama y algún que otro agujero en el guion.

¿Y quién no?

Si esperas una historia realista y muy elaborada.

¿Por qué...

… cierto personaje (de diseño molón) tiene presencia destacada en más de un póster y luego aparece diez segundos en la película? ¿Por qué dejan libre a cierto samurái después de un año de cautiverio?