02 marzo 2017

La cumbre escarlata

Edith es una joven idealista y soñadora, aficionada a la escritura y capaz de ver a los fantasmas, que se enamora perdidamente de Thomas, un completo desconocido para ella que ha viajado hasta los Estados Unidos en busca de financiación para una máquina de su invención. Pero su padre no aprueba ese amor, hay algo de lo que no se fía, no obstante Edith termina casándose con Thomas y yendo a vivir a Cumberland, conocido también como la Cumbre Escarlata.

Después de la orgía friqui de Pacific Rim, Guillermo del Toro cambia de tercio y nos cuenta una historia clásica de fantasmas, terror gótico salpicado por unas generosas dosis de romanticismo, en una propuesta mucho más seria que su anterior filme y, también, menos divertida, todo hay que decirlo.

Pero con ello no estoy afirmando que estamos ante un muermo de película, sino simplemente que es una propuesta diferente, una historia que bebe del terror más clásico, con una cuidada atmósfera, un magnífico diseño de producción y vestuario, siendo estos sin duda sus puntos más fuertes.

Porque la destartalada mansión en la que se desarrolla la mayor parte de la acción resulta realmente gigantesta y tétrica por momentos, es un personaje más; y el hecho de que se hunda poco a poco en la tierra roja es toda una metáfora de en qué estado moral están ciertos personajes (además de todo un homenaje a Poe).

Personajes que están perfectamente caracterizados por el trío protagonista, Mia Wasikowska (Stoker) es el ideal romántico decimonónico con ese rostro de facciones angelicales que posee, y Tom Hiddleston (Thor: El mundo oscuro) el perfecto caballero inglés; mientras que Jessica Chastain (Marte, Interstellar) da vida al personaje más oscuro, perturbado y perturbador de la historia. Completan el reparto Charlie Hunnam (Z. La ciudad perdida), Jim Beaver (Sobrenatural), Burn Gorman (Luces rojas), Bruce Gray (Starship Troopers) y Doug Jones como los diferentes fantasmas, entre otros.

Si bien la historia no es muy original, no le faltan tópicos, La cumbre escarlata (Crimson Peak, 2015) resulta una película con momentos inquietantes, unos personajes interesantes, con una gran ambientación y un final más sangriento de lo que uno espera.


LO MEJOR:
-El diseño de producción, el vestuario, la fotografía, la realización...
-El trío protagonista, especialmente Jessica Chastain.
-Ese toque a film clásico.

LO PEOR:
-Aunque en su base sean reales, los toques digitales hacen que los espectros resalten demasiado, parecen mejorables.

¿Quién debería verla?
Seguidores de Del Toro y quien guste del terror gótico.

¿Y quién no?
Hay alguna imagen no apta para mentes sensibles.

No hay comentarios: