Immortals

De Immortals (ídem, 2011) no me llamaba la atención, de lo que vi en los tráilers, su fotografía, demasiado parecida a 300, pero el hecho de que su historia se sustentara, más o menos, en la mitología griega y que el director fuera Tarsem Singh, quien realizara la muy recordada por aquí The Fall. El sueño de Alexandria, me animaba a ir al cine para comprobar si era algo más que efectos digitales y guerreros fornidos. Así que qué mejor manera de dar la bienvenida al nuevo año (la vi el 1 de enero) que adentrarse en una sala oscura y sumergirse en la imaginería visual del director indio.

Teseo es un joven campesino que cree ante todo en su valor para salir adelante y cuidar de sus seres queridos. Se verá obligado mermar sus reservas de dicho valor para encabezar la lucha contra el sanguinario Hiperión, quien busca por toda Grecia el fabuloso arco de Epiro para liberar a los titanes y derrocar a los dioses.

De Singh, director hasta la fecha nada prolífico y que estrena este año una de las dos versiones (hollywoodienses) de Blancanieves, me falta por ver La celda, pero a pesar de esta carencia no hace falta ser muy avispado para darse cuenta del gusto y la originalidad visual que el realizador imprime a sus (escasos) trabajos. Por suerte, en Immortals también se ve reflejado su carácter a pesar de las semejanzas estéticas mencionadas que tiene con los 300 de Zack Snyder, supongo que impuestas más bien por los productores, de hecho uno olvida pronto esos parecidos y se deja llevar por la potencia de las imágenes (con momentos sublimes, otros impactantes y a ratos ambas cosas) y por una historia (escrita por Charley y Vlas Parlapanides) que pasa de sofisticar y apuesta por lo visceral, con un Teseo bien construido al que da vida el próximo Superman, Henry Cavill (que ya pudo ser dicho superhéroe en la versión de Bryan Singer, así como el Batman de Nolan y el James Bond de Campbell, e incluso Edward Cullen); y con un malo realmente maloso al que pone rostro el impasible Mickey Rourke (Iron Man 2, Los mercenarios), que por otra parte se le ve en su salsa y crea un villano amoral que impone lo suyo, desde luego mucho más que el pusilánime Jerjes del film de Snyder.

Ya que me he metido en el reparto casi sin quererlo, reseñar el papelito del gran John Hurt (El topo, Outlander), la agradable visión de Freida Pinto (El origen del planeta de los simios), que nos regala (ella o su doble, da lo mismo) una muestra de su bonita anatomía; el que fuera malvado vampiro en Blade, Stephen Dorff, también tiene un hueco como un ladrón de rudos modales que termina luchando codo con codo con el bueno de Teseo. Contrariamente a la mayoría de los largometrajes mitológicos, en Immortals los dioses son interpretados por actores jóvenes, como Luke Evans, que le pone rostro a Zeus, y que curiosamente ya dio vida a otro dios en el remake de Furia de Titanes; Atenea, la amada hija del rey de los dioses, es interpretada por Isabel Lucas (Daybreakers); mientras que en las divinas carnes de Poseidón se mete Kellan Lutz, que seguro que las fans de la Saga Crepúsculo reconocen. Hay otros dioses y humanos, pero los aquí comentados son los papeles más relevantes.

Immortals es violenta, hipnótica y épica, una aventura que te sumerge en una época inventada pero inspirada en la historia y mitología que todos conocemos a grandes rasgos, es un relato de esos que antaño contaban alrededor de una hoguera, de los que te invitan a soñar mientras ves una puesta de sol o comienzas a entrar en el reino de Morfeo. Un grato espectáculo.

LO MEJOR:

-Visualmente tiene momentos deslumbrantes, Tarsem Singh es un genio en este aspecto.

-Sin ser ninguna maravilla, el desarrollo del guión te mantiene con interés el curso de los acontecimientos.

-Hiperión es un buen malo, cruel como pocos. Buena elección la de Rourke.

LO PEOR:

-Que su estética recuerde a 300... pero es algo que se olvida rápido.

¿Quién debería verla?

El referente es la mencionada segunda película de Zack Snyder, si te gustó, probablemente la epopeya de Singh también te haga disfrutar, aunque si simplemente eres de los que gozan del buen cine épico y mitológico (y violento), seguro que te lo pasas pipa con Immortals.

¿Y quién no?

Es violenta y aprovecha cualquier momento para deleitar la vista del espectador, así que si prefieres la serenidad al espectáculo esta no es tu película.