28 marzo 2019

Nación salvaje

Tras el, muy satisfactorio, visionado de Dragged Across Concrete (que próximamente verá publicada reseña por acá), el personal pedía más acción y, como con aquélla, se notaba que había muchas ganas del siguiente pase, el penúltimo de la tercera jornada de la Muestra Syfy.

***
Lily, Em, Sarah y Bex son cuatro buenas amigas que viven en Salem, donde un pirata informático está haciendo de las suyas crackeando información privada de muchos de ellos, tanto que la cosa llega a niveles medievales en los que la mayoría de los habitantes hayan a Lily y sus amigas como las culpables de todo.

Por los comentarios que había escuchado en la Muestra, esperaba que Nación salvaje (Assassination Nation, 2018), que está escrita y dirigida Sam Levinson (Another Happy Day), fuera de principio a fin una orgía de tiros y violencia, pero la verdad es que comienza como un drama adolescente cualquiera, pero muy consciente de los tiempos en los que vivimos, donde las redes sociales tienen un gran impacto en nuestras vidas.

De hecho, ése es uno de los temas centrales del film, la redes sociales y el uso que se les da, la pérdida de privacidad y, también, el creciente odio que se cuece en estas. Y ahí Levinson logra meterte la inquietud bien adentro, y es que resulta tan real como la vida misma (precisamente el día anterior algunos tuiteros habían dilapidado a un blog amigo por un tuit no muy redondo, cierto, pero hay tantas formas de decir las cosas...), y es inevitable preguntarse en muchos compases de la cinta, incluso en los instantes más hiperbólicos, si vamos directos en esa dirección (o si incluso ya hemos llegado a ese punto), la de la quema de las brujas, con pruebas o sin pruebas, da igual, tan solo con las apariencias o con una visión absolutamente torticera (esas fotos, nunca mostradas pero sí explicadas en los diálogos, de la hija del director) de la realidad; sin plantearse de forma crítica si lo que se filtra realmente incapacita a la persona para ejercer la función que hacía hasta la fecha y, por supuesto, sin condenar al que piratea una información que no entra dentro del interés común.

El amplio reparto está encabezado por Odessa Young (High Life), Abra, Suki Waterhouse (La princesa blanca) y Hari Nef (Transparent), cuarteto que cumple a las mil maravillas, ya que no solo interpretan bien sus papeles, sino que hay química entre ellas, imprescindible a la hora de resultar creíbles como mejores amigas. Colman Domingo (El blues de Beale Street, Fear the Walking Dead) es el director del instituto de las chicas, el cual también tiene un difícil momento de lucimiento con su sufrido personaje; mientras que Joe Chrest (Ant-Man) y Kathryn Erbe (El último escalón) son los, (poco) comprensivos y tolerantes, progenitores de Lily. Completa el reparto, entre otros, Joel McHale (Ted), un cuarentón felizmente casado.

Nación salvaje es una muy estimulante e inquietante película, donde el feminismo y la crítica social se dan la mano, donde el espectador se removerá en su asiento, inseguro, incapaz de no identificar el exagerado Salem de Sam Levinson con la sociedad que, entre todos, estamos construyendo. Una joya de muy recomendable visionado.


LO MEJOR:
-Que infunde verdadero temor por el camino que está siguiendo la sociedad en su conjunto.
-El cuarteto protagonista.
-Tanto la historia como la realización, ambas a cargo de Sam Levinson, así como la estética del film (lo que incluye fotografía, diseño de producción y vestuario).

LO PEOR:
-Que habrá quien se ofenda al verla.

¿Quién debería verla?
Todo el mundo, incluyendo (con más razón quizás) aquellas personas que, probablemente, no les guste lo que vean.

EDITADO [24/04/2020] Añado el vídeo con la presentación de la cinta y del corto que se pasó previamente:

No hay comentarios: